Fabricantes y distribuidores: no pasen por alto las oportunidades de planificación impositiva 2020 

Muchas empresas de fabricación y distribución han implementado cambios enormes en su cadena de suministros, operaciones o hasta en el modelo empresarial durante la pandemia de COVID-19. Es posible que su empresa haya experimentado importantes pérdidas de ingresos o cambios en la valoración de los activos.

Junto con estos cambios, la Ley de ayuda, alivio y seguridad económica contra el coronavirus (CARES) y otras medidas de ayuda por la pandemia a nivel federal y estatal han modificado las normas impositivas, específicamente con la intención de ayudar a los fabricantes y distribuidores. Con fin de año cada vez más cerca, es conveniente hacerse un tiempo para iniciar su planificación de impuestos con su asesor, para poder aprovechar al máximo estos beneficios y reducir al mínimo su carga fiscal para 2020.

Quizás pueda hacer deducciones más grandes por las pérdidas operativas netas

Muchas empresas de fabricación y distribución sufrieron pérdidas este año relacionadas con la pandemia. La Ley de ayuda, alivio y seguridad económica contra el coronavirus (CARES) ofrece suspensiones temporales a partir de las disposiciones de la Ley de Empleos y Reducción de Impuestos (TCJA) que interrumpieron el traspaso de las pérdidas operativas netas (NOL) y limitaron su uso al 80 % del ingreso sujeto a impuestos.

En particular, la Ley de ayuda, alivio y seguridad económica contra el coronavirus (CARES):

• Otorga un período de traspaso de cinco años para las NOL que se registren en los años fiscales a partir del 1 de enero de 2018 hasta el 31 de diciembre de 2020.
• Suspende temporalmente el 80 % del límite del ingreso sujeto a impuestos en el uso de las NOL, lo que le permite a los contribuyentes compensar totalmente los ingresos sujetos a impuestos durante los años fiscales permitidos, independientemente de cuándo se generaron las NOL.

Es posible que usted quiera aprovechar el traspaso al enmendar o modificar las declaraciones de impuestos de los años fiscales tan remotos como 2013. Debido al cambio en las tasas impositivas, puede que sea más beneficioso llevar las pérdidas nuevamente a años fiscales con tasas más altas.

Solicite su crédito fiscal por investigación y desarrollo (R&D)

La pandemia ha llevado a muchas empresas de fabricación, entre otras, a transformar radicalmente sus modelos de operación y cambiar sus ofertas de productos. Si las actividades de su empresa han incluido el desarrollo de procesos, software o productos nuevos, o la mejora de los ya existentes, es posible que su empresa califique para el crédito fiscal para investigación y desarrollo (R&D). Incluso si espera registrar una pérdida este año, aún así es posible que desee aprovechar el crédito fiscal para investigación y desarrollo para usarlo para cubrir impuestos futuros.

En el caso de los fabricantes, las situaciones desencadenadas por el COVID-19 que podrían generar gastos de investigación y desarrollo elegibles para el crédito fiscal para R&D incluyen la transformación de sus procesos estándar para fabricar y distribuir equipos de protección personal o incrementar la producción de bienes de consumo para el hogar. El desarrollo o la mejora de los procesos de fabricación a menudo requieren experimentación y una serie de ensayos costosos para cumplir con las especificaciones del producto.

Los problemas en la cadena de suministro también provocaron que muchos fabricantes decidieran experimentar con materias primas alternativas y rediseñar ciertos productos. Si algo de esto ocurre en su empresa, consulte con su asesor de impuestos para ver si su empresa es elegible para este crédito.

Las empresas emergentes con ganancias por menos de $5 millones (y sin ganancias para el período de cinco años terminado en el año del crédito) pueden, en ausencia de una carga fiscal, aplicar el crédito por R&D para compensar hasta $250,000 en impuestos de nómina todos los años, por un máximo de cinco años.

Por último, tengan en cuenta que para los años fiscales iniciados después del 31 de diciembre de 2021, los contribuyentes deberán capitalizar y amortizar sus gastos en investigación o iniciativas experimentales (que incluyen los costos de desarrollo de software) a lo largo de un período de cinco años. En la actualidad, esos costos son inmediatamente deducibles como gastos.

Si realiza actividades o procesos relacionados con la industria de la fabricación que cree que podrían estar alcanzados por esta disposición, consulte a un asesor de impuestos de R&D para conocer más. Un profesional calificado con experiencia en impuestos por R&D puede ayudarle a evaluar su elegibilidad, calcular el monto de los ahorros del crédito que podría recibir con este crédito, como también asesorarlo y ayudarlo con la documentación adecuada para obtener el crédito.

Tenga en cuenta los créditos de ayuda por la pandemia que quizás no haya aprovechado

Los gobiernos federal, estatales y locales han brindado algo de ayuda a los fabricantes al permitirles postergar varios pagos de impuestos, incluidos impuestos sobre la renta, de ventas y por uso y nómina. Algunas de estas postergaciones y créditos pueden complicar más el cálculo de los próximos pagos estimados de impuestos. Analice con su asesor qué pagos usted debería hacer antes de finales de 2020 y cuáles puede postergar hasta 2021.

Los impuestos estatales y locales pueden ser más complicados

¿Cambió de proveedores, trasladó las operaciones de fabricación a diferentes estados o países o trabajó parte de su fuerza laboral de forma remota desde estados en los que usted normalmente no tiene operaciones? Si es así, su declaración de impuestos y sus obligaciones de pago pueden haber cambiado también.

Estas son algunas cosas para recordar:

• Incluso si solo están trabajando de forma remota temporalmente debido al COVID-19, los empleados que trabajan desde su casa en otros estados pueden crear nexos en ese estado o modificar la distribución de ingresos imponibles en estados en los que usted ya tenía nexos.
• No todos los estados incorporaron las disposiciones de la Ley de ayuda, alivio y seguridad económica contra el coronavirus (CARES) a sus propios códigos.

No olvide actualizar su estudio de determinación de precios de transferencia

Si su empresa realiza operaciones empresariales entre entidades relacionadas en diferentes países, probablemente usted necesitará completar con regularidad un estudio de determinación de precios de transferencia actualizado que demuestre que esas transacciones se tasan «en condiciones de igualdad». Esta es la documentación requerida para mantenerse dentro de las normas impuestas por las reglamentaciones de los EE. UU. diseñadas para combatir la evasión impositiva o la traslación impositiva.

Por lo general, los estudios de determinación de precios de transferencia necesitan actualizarse todos los años. Es posible que este año experimente más cambios que lo habitual si tuvo cambios o interrupciones en su cadena de suministros, o si cambió el flujo de ventas internacionales.

Puede usar un método más sencillo para asignar costos al inventario final

A finales de 2019, el IRS y el Tesoro publicaron regulaciones finales relacionadas con la capitalización del inventario fiscal conforme a la Sección 263A del Código de Ingresos Internos (IRC); estas regulaciones se aplicaban a cualquier año fiscal a partir del 19 de noviembre de 2018.

Entre otras cosas, las regulaciones agregaron otro método para asignar los costos adicionales de la Sección 263A al inventario final: el método de producción simplificado modificado (MSPM). El MSPM puede ofrecerles a los fabricantes más grandes un método mucho más sencillo para asignar estos costos, lo que puede generar una menor capitalización de la Sección 263A que el SPM. Esto puede proporcionarles a los fabricantes beneficios importantes. Si usted no adoptó el MSPM el año pasado, puede que quiera considerar la posibilidad de incorporarlo este año.

Evalúe si debería aprovechar el bono de depreciación ampliado

A partir de 2018 se amplío el alcance de la amortización adicional, que es un método de amortización acelerada que le permite obtener una deducción adicional el primer año de propiedad de un bien elegible. En el caso de las propiedades adquiridas después del 27 de septiembre de 2017, y hasta finales de 2022, el 100 % de la base puede depreciarse en el primer año, y la propiedad solo debe ser «nueva para el contribuyente»; es decir, la propiedad usada puede ser elegible. Además, la propiedad elegible para mejoras (QIP) ahora también es elegible para el bono de depreciación del 100 %.

Además, la Ley de ayuda, alivio y seguridad económica contra el coronavirus (CARES) estableció una supervisión del Congreso y la QIP ahora se clasifica de nuevo con la depreciación de 15 años (en lugar de un período de 39 años). La mayoría de las mejoras no estructurales que haga en el interior de su edificio no residencial se consideran QIP. Estos cambios se aplican de forma retroactiva a las propiedades adquiridas y en funcionamiento después del 31 de diciembre de 2017, e incluyen el año fiscal 2020. Es posible que quiera considerar enmendar sus impuestos de 2018 y 2019 (si no lo hizo aún) o presentar un cambio en su método de registro contable con el Formulario 3115 para reclamar el bono de depreciación.

La planificación de fin de año para 2020 debería incluir una evaluación de las propiedades compradas durante el año y cualquier QIP. Y, si está pensando hacer compras o mejoras, hable con su asesor de impuestos sobre si tiene sentido apurarse y hacerlas este año o postergarlas hasta el año que viene.

Cambios temporales a las normas de gastos por intereses de la empresa

Los fabricantes y distribuidores con estrategias de capital que dependen en gran medida de los préstamos pueden descubrir que la Ley de ayuda, alivio y seguridad económica contra el coronavirus (CARES) proporciona ayuda temporal para los efectos negativos de los límites de la TCJA relacionados con las deducciones de los gastos por intereses de la empresa.

• Para las corporaciones, la Ley de ayuda, alivio y seguridad económica contra el coronavirus (CARES) amplió temporalmente la limitación de la Sección 163(j) del IRC correspondiente a las deducciones permitidas para el gasto por intereses de la empresa al 50 % del ingreso imponible ajustado, tanto para 2019 como para 2020 (después de una reducción al 30 % a partir de 2018). Esta disposición también permite el uso de los ingresos imponibles ajustados de 2019 para calcular la limitación para 2020. Ese límite del 30 % regresa en 2021.
• No obstante, las asociaciones solo pueden usar la limitación más alta que es del 50 % para el año fiscal 2020. Si usted como socio traspasa un gasto en exceso por intereses de la empresa de 2019 a 2020, automáticamente puede reclamar la mitad de ese monto en exceso en 2020 a menos que no sea elegible para hacerlo.

Está previsto que el límite del 30 % regrese para el año fiscal 2021. Además, los ingresos imponibles ajustados actualmente se computan sin considerar la depreciación, amortización ni desgaste; sin embargo, a partir de 2022 esos puntos estarán incluidos. Esta información puede cambiar su estrategia de capital para finales de este año o principios de 2021. Consulte con su asesor de impuestos.

Aproveche al máximo su deducción para ingresos comerciales elegibles (QBI)

Al igual que en el año fiscal 2019, los propietarios de ciertas entidades intermediarias tal vez puedan recibir una reducción del 20 % sobre las QBI, lo que podría reducir su tasa de interés máxima efectiva para 2020. Esas entidades incluyen corporaciones regidas por el subcapítulo S, sociedades y algunas compañías de responsabilidad limitada. Existe otra ventaja para esas entidades: mantienen la deducción en los impuestos locales y estatales a nivel de la entidad.

Préstamos del Programa de protección de pago

Según lo que se establece en este momento, los préstamos del Programa de protección de pago que se condonen no se considerarán en los ingresos imponibles, pero las empresas tampoco pueden descontar ningún gasto pagado con esos fondos. Y, si bien esto no es un problema estrictamente de la planificación de impuestos, esta puede ser la tarea más importante a realizar antes de fin de año si usted recibió un préstamo del PPP: decidir si solicitar la condonación de un préstamo del PPP ahora o esperar. Usted debe comenzar a hacer los pagos de su préstamo 10 meses después del último día del período cubierto por la condonación del préstamo, pero puede solicitar la condonación en cualquier momento antes de la fecha de vencimiento del préstamo.

Póngase en contacto con su asesor de impuestos de Kaufman Rossin antes de fin de año para conocer más sobre cómo puede maximizar sus créditos y deducciones impositivas de 2020 de su empresa de fabricación o distribución con la planificación de impuestos mientras se prepara para 2021.