60 años de felicidad: fundación de la empresa
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Sesenta años atrás, dos amigos dieron un gran paso.
Mi buen amigo y hermano de fraternidad Jay Rossin y yo nos graduamos en la Universidad de Florida, con pruebas fehacientes de que estábamos destinados a ser empresarios: habíamos creado un negocio muy bien valorado (aunque de corta duración) que proveía de sándwiches a estudiantes hambrientos. En ese proceso, aprendimos mucho sobre los riesgos ocasionados por la escasez de personal, las largas horas de trabajo y las presiones regulatorias.
Estudiamos juntos para el examen de contaduría pública y ambos obtuvimos un empleo remunerado relacionado con nuestra profesión. Él trabajaba en contabilidad pública, y yo había abandonado el sector público para trabajar para un cliente en Georgia que se dedicaba a los bienes inmuebles y al tabaco. Pagaban más, pero era un poco… inestable. Los dos estábamos aprendiendo mucho sobre cómo no administrar un negocio. Y por varias razones (incluido un cheque sin fondos — solo un error, lo juro) mi madre me presionaba para que regresara a Miami.
Así que dije: «Vamos a hacer negocios», y Jay, un poco más reflexivo en su accionar que yo, dijo: «Déjame pensarlo». Él tenía un empleo y una cartera de clientes privada más valiosa que la mía. Pero aun así aceptó, y dimos los primeros pasos para construir un lugar donde pudiéramos ganarnos la vida y disfrutar de venir a trabajar.
No había forma de prever la gran travesía que estábamos iniciando.
Jay H. Rossin y James R. Kaufman, fundadores de Kaufman Rossin
Desde el principio, todo fue emocionante. Nuestro primer cliente, aunque ya está jubilado, sigue siéndolo hoy en día. En aquella época, a los contables no se les permitía hacer publicidad, por lo que en realidad se trataba de un negocio de conexiones. Jay utilizó las habilidades que había demostrado al reclutar aspirantes de la fraternidad Pi Lam para que se pusieran en contacto con los comerciantes de la calle Flagler, en el centro de Miami, y repartieran tarjetas de visita. Yo me puse en contacto con abogados y otras personas en la comunidad, y así construimos nuestra firma, cliente por cliente. De a un cliente y una oportunidad a la vez, crecimos lentamente durante los primeros cinco a siete años.
Comenzamos a incorporar personal a finales de los 60 y principios de los 70, y eso fue realmente estupendo. Muchos de los que se unieron a nosotros habían salido recientemente de la universidad. Nuestra primera oficina estaba situada en Biscayne Boulevard, y luego, en 1965, nos trasladamos a 1502nd Avenue. Era un sitio más grande, con más espacio para crecer.
Y luego, en 1974, nos trasladamos a la oficina situada en Grove, ¡donde realmente despegamos! El flamante edificio poseía un diseño icónico de mediados de siglo, obra de Kenneth Treister (el hombre que diseñó las tiendas de Mayfair) y para nosotros se convirtió en un lugar perfecto para fomentar nuestra cultura de «felicidad en el trabajo». Sumamos empleados, sumamos clientes, organizamos fiestas inolvidables. Las personas que se unieron a nosotros en los años 70 y 80 han desarrollado sus carreras profesionales junto a nuestra firma, ayudándonos a aprender nuevas disciplinas y a desarrollar prácticas a medida que las necesidades de los clientes iban evolucionando. A lo largo de los años pasamos de 4,000 pies cuadrados a ocupar casi todo el edificio, y añadimos oficinas en Broward y Palm Beach para brindar servicio a los clientes y difundir nuestra cultura allí. Era un gran momento para hacer negocios en el sur de Florida.
Ahora, con sesenta años de experiencia, más de 500 contadores públicos y asesores continúan guiando a Kaufman Rossin hacia el futuro. Bajo la dirección de mi sucesor, el director ejecutivo Blain Heckaman, la firma se encuentra situada en otro flamante edificio en Coconut Grove, y además contamos con oficinas en Ft. Lauderdale, Boca Raton y otras ubicaciones en Estados Unidos y el mundo. La firma continúa brindándole felicidad a los clientes, y agradecemos la felicidad que nos han brindado durante seis increíbles décadas.
James R. Kaufman es socio fundador y director emérito de Kaufman Rossin, una de las 100 principales empresas de contaduría pública certificada y asesoramiento en EE. UU.
