La deducción 179D mejorada ofrece ahorros impositivos para bienes inmuebles que sean eficientes en términos de energía

Las últimas tendencias y cambios en la legislación impositiva hacen que la deducción 179D para edificios comerciales energéticamente eficientes sea más atractiva y lucrativa que nunca

En los proyectos de bienes inmuebles comerciales, maximizar los incentivos fiscales puede repercutir significativamente en los resultados finales. Uno de los incentivos que está ganando popularidad es la deducción del Código de Ingresos Internos (IRC), artículo 179D, que ofrece importantes beneficios para los edificios energéticamente eficientes. Gracias a las recientes tendencias y cambios en la legislación impositiva, este es el momento oportuno para considerar la deducción 179D para edificios comerciales energéticamente eficientes.

La deducción 179D puede compensar los costos asociados a la implementación de tecnologías energéticamente eficientes en los edificios comerciales, lo que supone un ahorro sustancial para los desarrolladores de bienes inmuebles. Los arquitectos e ingenieros que diseñan edificios para entidades gubernamentales o exentas de impuestos también pueden acceder al programa.

A continuación se exponen cinco razones por las que los propietarios de proyectos comerciales deberían considerar la posibilidad de aprovechar hoy mismo esta oportunidad de ahorro en impuestos.

1. Deducción 179D permanente y mejorada

Para fomentar las inversiones en eficiencia energética, el gobierno federal codificó permanentemente el artículo 179D en 2021 como parte de la Ley de Apropiaciones Consolidadas. Posteriormente, en 2022, la Ley de Reducción de la Inflación mejoró la deducción para aumentar la flexibilidad y las oportunidades. El beneficio fiscal ampliado actualiza el valor de la deducción 179D, agrega nuevos tipos de edificios elegibles, cambia el método de cálculo y añade un restablecimiento de la deducción. Anteriormente valía menos de dos dólares por pie cuadrado ($1.88/pie cuadrado en 2022), y ahora vale hasta $5.00 por pie cuadrado para edificios puestos en servicio después del 31 de diciembre de 2022.

La mejor oportunidad es para los proyectos de bienes inmuebles comerciales que se empezaron a construir antes del 29 de enero de 2023 y que se pondrán en servicio a partir de 2023. Estos proyectos serán elegibles automáticamente para la deducción mejorada de $2.50-$5.00 por pie cuadrado sin necesidad de cumplir con los requisitos salariales vigentes en virtud de la Ley de Reducción de la Inflación.

2. Aumento de la demanda de edificios sustentables

La demanda de edificios sustentables aumenta a medida que las empresas reconocen los beneficios a largo plazo de reducir su huella ambiental. Recurrir a la deducción 179D les permite a los propietarios de proyectos comerciales demostrar su compromiso con la sustentabilidad y, al mismo tiempo, obtener importantes recompensas económicas. Al integrar medidas de eficiencia energética en sus proyectos como la mejora de los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado; la iluminación o el revestimiento del edificio, los propietarios pueden atraer a inquilinos ecológicamente comprometidos y mejorar sus posibilidades de comercialización.

3. Ahorro de costos y retorno de la inversión

La aplicación de tecnologías y medidas de eficiencia energética puede requerir una importante inversión inicial. Sin embargo, la deducción 179D ofrece un retorno tangible de esa inversión. Al solicitar la deducción, los propietarios de proyectos comerciales pueden reducir su carga fiscal, generando un ahorro inmediato que pueden reinvertir en sus negocios o utilizar para acelerar futuros proyectos. Este incentivo financiero facilita la viabilidad económica de las prácticas sustentables y también acelera la adopción de tecnologías energéticamente eficientes en todo el sector de bienes inmuebles y de la construcción.

4. Cumplimiento de códigos y estándares energéticos

Los códigos de construcción y los estándares de eficiencia energética siguen evolucionando, y muchas jurisdicciones adoptan requisitos más estrictos en torno al desarrollo sustentable. Esto podría significar que muchos proyectos de construcción que cumplan con el código de edificación local podrían calificar automáticamente a la deducción 179D.

Hasta 2027, el artículo 179D seguirá teniendo como referencia la norma 90.1-2007 de ASHRAE. Muchas jurisdicciones están adelantadas en al menos dos o tres ciclos de códigos con respecto a esta norma. Esto significa que el período comprendido entre 2023 y 2027 ofrece una oportunidad única para aprovechar la 179D, antes de que el programa se adapte a una serie de normas de eficiencia energética más estrictas.

Con la deducción 179D, los propietarios de proyectos comerciales pueden adaptar sus proyectos a estas normas en evolución y compensar los costos asociados. Aplicando medidas de eficiencia energética más allá de lo exigido, los propietarios no solo pueden cumplir con la normativa, sino también superar las expectativas, y así obtener una ventaja competitiva en el mercado.

5. Impacto medioambiental positivo

Adoptar prácticas sustentables implica mucho más que beneficios económicos. Al recurrir a la deducción 179D e invertir en mejoras de eficiencia energética, los propietarios de proyectos comerciales contribuyen a un futuro más ecológico. Los edificios energéticamente eficientes consumen menos recursos, reducen las emisiones de gases de efecto invernadero y fomentan la protección del medioambiente. Si los desarrolladores inmobiliarios y otras partes interesadas del proyecto promueven la sustentabilidad, podrán posicionarse como ciudadanos corporativos responsables y, potencialmente, ganarse la confianza y el apoyo de clientes y partes interesadas con conciencia medioambiental.

El panorama actual presenta una oportunidad excepcional para que los propietarios de proyectos comerciales capitalicen la deducción 179D. Con la deducción codificada y mejorada, la creciente demanda de edificios sustentables, el ahorro de costos, los beneficios por cumplimiento de la normativa y el impacto ambiental positivo, procurar mejoras de eficiencia energética nunca resultó tan ventajoso. Si la aprovechan ahora, los desarrolladores de edificios comerciales pueden disfrutar de compensaciones económicas, atraer inquilinos, adelantarse a la evolución de las normas y contribuir a un futuro más sustentable.

Comuníquese con el equipo de Incentivos y Créditos Fiscales de Kaufman Rossin para averiguar si sus proyectos de bienes inmuebles comerciales pueden calificar para la deducción del artículo 179D y otros ahorros impositivos.