Expertos financieros ven una recuperación que tendrá una apariencia diferente

Mientras Miami-Dade se une al resto de los Estados Unidos para dejar atrás al 2020, los expertos financieros reflexionan sobre un año que trajo un evento tras otro sin precedente mientras intentan predecir lo que se espera el próximo año.

El consenso es que la economía se recuperará, lo cual se demuestra de forma contundente en el tercer trimestre del año cuando el PBI del país aumentó más del 33 %, según el US Bureau of Economic Analysis, la principal recuperación de la baja del 31.4 % en el trimestre anterior.

«Pero no se asemejará a lo anterior», afirmó Meredith Tucker, contadora pública y socia de los servicios empresariales en la firma contable y de asesoramiento Kaufman Rossin. «La forma en que nos conectamos cambiará y, para algunas empresas, la forma en que nos proporcionan servicios también cambiará».

Para algunas empresas, manifestó, el progreso exitoso requiere una acción de opuestos: aceptar nuevas formas de brindar servicios e interactuar tanto interna como externamente mientras se adopta un enfoque de «empezar de nuevo por lo básico» en la parte administrativa.

«Algunos de esos aspectos básicos de los que hablamos es elaborar presupuestos para el nuevo año, proyectar el flujo de caja, estudiar la liquidez y retener las ganancias y el capital», comentó; además, agregó que las empresas tendrán que participar en algunos aspectos poco atractivos de la reelaboración de presupuestos. «No hay secretos, algunas compañías tienen que enfocarse en las ganancias y las pérdidas y ver si se necesita recortar algunos proveedores».

Esas tareas afectarán algunas industrias más que a otras. Mientras que algunos servicios profesionales, empresas de cuidado de la salud y de transformación digital no solo sobrevivieron sino que crecieron desde el confinamiento por la cuarentena en marzo, otros que dependen mucho de los negocios presenciales, desde cines y restaurantes a hoteles y la industria de los cruceros, se vieron muy afectados.

Para que las industrias de la hospitalidad y el turismo de Miami-Dade se recuperen, deben contar con una ayuda de estímulo adicional, incluida otra entrega de préstamos del Programa de protección de pago (PPP) y que la mayoría de la población esté vacunada, declaró Claudia Cancio, directora de la banca de relaciones y vicepresidente sénior del First National Bank of South Miami.

Durante casi ocho meses, los legisladores en Washington, DC lucharon para obtener un paquete de estímulo de seguimiento para la Ley de ayuda, alivio y seguridad económica contra el coronavirus (CARES) de $2.2 millón de millones, aprobado el 27 de marzo, y la Ley de Mejora de Atención Médica y el Programa
de protección de pago el 24 de abril, la parte del PPP del cual se creó un programa de préstamo «perdonable» para incentivar que los empleadores retengan a los empleados.

Solo el First National Bank of South Miami emitió 500 préstamos PPP que totalizaron $80 millones, con lo cual se conservaron cerca de 8,000 puestos de trabajo, afirmó. Pero esos fondos ya se agotaron y necesitan reponerse.

«El congreso debe unir las leyes y enviar este alivio a las empresas», dijo. «[Si no sucede], habrá consecuencias graves en la economía. Las pequeñas empresas son la mayoría de todas las empresas, por lo que el alivio debe llegar».

Y mientras más pequeña y menos organizada esté la empresa, hay más probabilidades que afecte peor durante una recesión económica producida por una pandemia, comentó Eddy Arriola, presidente y director ejecutivo de Apollo
Bank y director de la sucursal de Miami del Banco de la Reserva Federal en Atlanta.

Un paquete de estímulo extra estabilizaría la economía y le permitiría a los bancos, las empresas y los gobiernos tomar las mejores acciones posibles en los próximos tres a seis meses, afirmó. Idealmente, el estímulo brindaría ayuda directa a los gobiernos locales y estatales, los proveedores de cuidados de salud y las personas.

Otra entrega de préstamos PPP, que los bancos otorgarían nuevamente a las empresas solicitantes que califiquen, no son tan buenos como la ayuda directa individual, la cual evade un defecto en el sistema PPP que favorece a empresas más organizadas que, generalmente, también están mejor capitalizadas y tienen más acceso a las instituciones financieras, aseveró.

«Los clientes con los que trabajamos al principio estaban bien organizados», comentó. «Tenían toda la información y cumplían con todos los requisitos. No pudimos ayudar tan rápidamente a los menos sofisticados. Me gustaría que la próxima entrega llegue a más empresas y comunidades que no tienen tanto acceso a bancos o bancos menos favorecidos en zonas urbanas o rurales, no simplemente «hagamos lo mismo, por tercera vez» con el PPP».

Espero, comentó la Sra. Cancio, que el lanzamiento nacional de las vacunas «sea un punto de inflexión» cuando alcance un público más amplio. Una reciente encuesta del Pew Research Center da cuenta que el 60 % de las personas que respondieron dijeron que «definitivamente o probablemente» se colocarían la vacuna contra la COVID-19 hoy mismo, pero espera que el porcentaje aumente cuando las pruebas de la seguridad y eficacia se difundan.

«Que la población acepte algo nuevo es siempre un desafío, pero creo que como la vacuna se comenzará a administrar a los trabajadores de atención médica, la gente comenzará a confiar más», afirmó. «Mucho tendrá que ver con la comunicación (los medios, todo lo demás), lo cual será crucial en cómo se retrata todo».

En lo que respecta a cómo se planificaría los negocios a futuro con la información disponible en la actualidad, la respuesta es muy variada. La Sra. Tucker dijo que Kaufman Rossin podría trabajar con clientes sobre la base de los análisis del movimiento de fondos durante seis meses para considerar fondos alternativos o formas de prolongar el ciclo de pago, pero agilizando su ciclo de ingresos.

«Para nuestros empresarios, existe esa imagen más grande en la que usted retrocede y considera cuál es el objetivo para esta empresa», dijo. «¿Es una empresa tecnológica nueva que está generando propiedad intelectual con la esperanza de darse a conocer en tres años? Porque podría tomarlo diferente que alguien planifica hacer los ajustes necesarios durante 30 años y luego desarrollar».

Algunas empresas están realizando planificaciones de medio año, en las que analizan situaciones de cómo se vería el futuro en dos a tres años. La práctica no proporciona garantías con respecto a la desaceleración económica imprevista que pueda provocar la pandemia a futuro, pero crea un sentido de orden, comentó.

«Por ejemplo, trabajamos con colegas en la seguridad en TI», dijo. «Ahora debe trasladar toda su empresa a Internet y si ya había pensado en tomar medidas de seguridad a largo plazo, está en mejor situación».

Sin embargo, no hay tanta predicción que se pueda hacer, estimó el Sr. Arriola, ya que cada planificación sobre cuánto tiempo duraría la pandemia y cuán efectivos podrían ser la Ley de ayuda, alivio y seguridad económica contra el coronavirus (CARES) y sus programas fueron incorrectos.

El resultado es una gran cautela para el 2021, aunque el sur de Florida posiblemente esté preparado para un gran crecimiento en los próximos tres años, dijo.

«La gente se muda al sur de Florida porque hay más espacio, más sol, impuestos bajos y un excelente estilo de vida», se sinceró. «Las inversiones que nuestra comunidad realizó en las últimas dos décadas están dando sus frutos. Es probable que Goldman Sachs no venga al sur de Florida solo por el excelente clima y los impuestos. También tenemos gente muy capacitada y una gran infraestructura, y aunque las viviendas no son lo ideal, están mejorando».

Durante 2020, Miami-Dade refinanció miles de millones en bonos excepcionales en medio de lo que el Director de la Administración de Bonos Arlesa Wood describió como «un entorno de tasa de interés históricamente baja».

No durará por siempre y probablemente no será por mucho tiempo en el futuro cercano, afirmó la Sra. Tucker, pero ahora ayuda.

El Sr. Arriola, por el contrario, dijo que los voceros de la Reserva Federal manifestaron que las tasas de interés no solo pueden, sino que deben ser bajas «por largo tiempo», una opinión que se atribuye en gran medida a una nueva escuela de pensamiento a la cual muchos se adhieren: la teoría monetaria moderna.

«Si usted gasta más dinero que el que recibe, es realmente malo, eso es lo que dijeron», afirmó. «Pero la hipótesis básica [de la teoría monetaria moderna] es que los déficits de presupuesto no cuentan. Siempre que tenga control sobre su propia moneda, tenga una economía estable y fuerte como la de EE. UU. y Europa, y siempre que su PBI crezca más rápido que la inflación, estará bien. Puede seguir imprimiendo dinero y gastando déficit».

En este momento, los EE. UU. imprimen dinero sin tasa de interés y parece que está funcionando. Innumerables industrias sufrieron golpes y hubo varias «pérdidas económicas» inevitables durante dicha alta y repentina recesión económica, pero el estado económico de la unión se mantuvo fuerte, dijo.

«Muchas personas perdieron sus trabajos, lo cual no es bueno, y las cosas se vieron afectadas, pero no fue solo por el colapso económico», opinó. «Fueron los problemas de las industrias. Muchas cosas entraron en juego. Pero el mercado de valores no colapsó. Tampoco el sector inmobiliario».

¿Y por cuánto tiempo el país puede continuar su gasto y prácticas con tasa de interés bajo actuales?

«Es la pregunta del millón», comentó. «Jamás se había hecho antes. La Reserva Federal, en su declaración pública, manifiesta que esto debe pasar y se puede mantener por al menos una década. Pero, ¿quién sabe?»