5 maneras en que los inversores de bienes inmuebles pueden administrar el flujo de caja

Si usted o sus clientes tienen una propiedad de alquiler, consideren estas estrategias financieras para que sus ingresos les alcancen durante la incertidumbre económica.

Los inversores de bienes inmuebles se sienten cada vez más atraídos por el mercado, y apuestan a la pujanza de las propiedades de alquiler en el futuro. Pero la incertidumbre económica en torno a la pandemia del COVID-19 está afectando a casi todas las clases de activos de bienes inmuebles, y la demanda comercial está en baja y el desempleo amenaza la recuperación por el lado residencial. Así que los inversores, al igual que los profesionales de bienes inmuebles que tienen inversiones inmobiliarias, deberían darle a la administración del flujo de caja una posición prioritaria. Por si surgen más dificultades económicas más adelante, querrá tener dinero suficiente a mano para mantener su empresa a flote durante momentos inciertos.

La administración del flujo de caja durante los próximos meses es clave: reducir los egresos y aumentar los ingresos. Para lograrlo, tanto usted como sus clientes inversores deben armarse con las herramientas adecuadas para evaluar el flujo de caja, incluidas proyecciones de ingresos de 13 semanas para cada propiedad de inversión. Calcule el nivel de mora en la renta que puede soportar y sepa en qué porcentaje de mora se quedará sin dinero. Haga una proyección de las morosidades que podrían durar algunos meses y qué pasaría si no se recuperaran después de ese período.

Si tienen presente esas medidas, los profesionales pueden aprender estos cinco pasos para administrar el flujo de caja y compartirlos con sus clientes.

1. Hable con su prestamista. Los pagos de hipotecas y los impuestos sobre la propiedad a menudo son dos de los gastos más grandes para los propietarios de bienes para alquilar. Los inversores deberían comunicarse con su prestamista con regularidad para mantener informado al banco sobre su situación con los ingresos y si piensan pedir ayuda financiera. Si tiene propiedades que se encuentran en un período inicial de arrendamiento, es posible que quiera ajustar su pronóstico de ganancias para estar en línea con las condiciones del mercado y analizar estos cambios con sus socios y prestamistas. A muchos prestamistas no les interesa ejecutar las hipotecas sobre propiedades comerciales o multifamiliares y prefieren coordinar con el deudor una modificación de su acuerdo de financiamiento. Considere solicitar una suspensión momentánea del pago de intereses, la condonación del préstamo o la reestructuración de su deuda. Además, comparta información con su prestamista y tenga en cuenta que quizás tenga que enviar información financiera detallada si desea hacer cambios a su acuerdo de financiamiento. Si recibió un préstamo del Programa de protección de pago, los pagos de los intereses se encuentran entre los gastos contemplados en la condonación.

2. Piense en sus impuestos inmobiliarios. Es posible que pueda disputar sus impuestos sobre la propiedad. Las depreciaciones del mercado, los defectos de construcción y otros cambios pueden reducir el valor justo del mercado sobre el cual se tasa una propiedad; si cree que su valuación no contempla esos aspectos, tal vez valga la pena disputar. Algunos estados también ofrecen ajustes de valoración relacionados con desastres o aplazamientos de impuestos.

3. Recorte o posponga algunos gastos. Los proveedores pueden aceptar cambiar los términos de pago u otorgar extensiones. Analice cambios en sus proveedores o iniciativas de reorganización que podrían permitirle ahorrar dinero. Si trabaja con una empresa de administración externa, pregunte si la empresa puede ser flexible con el acuerdo o si se pueden renegociar los términos. Mantenga los espacios en los edificios como utilizables para evitar violar los acuerdos de arrendamiento, incluso si los inquilinos no están usando las instalaciones en este momento.

4. Piense en otras formas de acceder a efectivo El programa federal Main Street Lending y los préstamos por daños económicos ante catástrofes (EIDL, en inglés) pueden ser alternativas para acceder a los fondos que necesita. Tal vez pueda obtener una línea de crédito para capital de trabajo para cubrir las necesidades a corto plazo. Si no ha aprovechado toda la capacidad de su propiedad, considere refinanciar la hipoteca. Recurra a prestamistas no bancarios, como fondos de inversión, prestamistas de oficinas privadas y capitales privados. Si bien pagará tasas de interés más altas, en este momento muchos de estos prestamistas tienen más fondos y recursos de evaluación disponibles que los bancos.

5. Coordine con los inquilinos alternativas para mantener el flujo de renta Si bien en este momento rige una moratoria de desalojo federal temporal, muchos inquilinos se pondrán al día con la renta y retomarán el pago. Pero piense con cuidado sobre desalojar a los inquilinos una vez que termine la moratoria. La recesión económica podría dificultarle volver a alquilar sus espacios vacíos. Puede ayudar a informar a los inquilinos comerciales sobre los préstamos del PPP u otros programas disponibles para las empresas. Los inquilinos pueden averiguar si tienen una posibilidad de presentar una reclamación en el seguro por interrupción de las operaciones comerciales, que podría cubrir los pagos de la renta y otras pérdidas.


Marc Feigelson, CPA, is a Management Chief Financial Officer at Kaufman Rossin, one of the Top 100 CPA and advisory firms in the U.S.